Valencia, fútbol y otras cosas
sábado, 21 de febrero de 2015
Discurso introductorio a la teoría del vaciamiento del centro
Buenas, a todos, a todas, a tí, cariño, a ti también, joputa, me he fijado en una táctica que emplea el Valencia que considero interesante, y para dar notoriedad a mi decubrimiento, he ideado una teoría, sí, una teoría con un nombre muy chulo, es la teoría del vaciamiento del centro, ¿qué cómo se me ha ocurrido?, pues evidentemente gran parte se debe a mi genio y creatividad, ¡y qué mejor que elegir un nombre llamativo y pretencioso para darme aires de importancia!, pues sí, lo reconozco, todo esto que os estoy contando no es más que para alimentar mi ego, mi enorme ego, soy yo el decubridor de la teoría del vaciamiento del centro. ¿No os habéis fijado? ¡Pero si es evidente! Jum, evidente para un cerebro como el mío, claro. Privilegiado. El señor Espírito Santo, principalmente en situaciones de ataque, a menudo deshabita la zona central o la reduce al mínimo de efectivos, porque busca un equipo de golpes dejando en un tercer plano la elaboración central, estéril o no. De hecho, aun no estando Negredo sobre el campo, contad el número de veces que Diego Alves ha buscado en largo a Gomes, cercano a la frontal, para recibir de espaldas, y por supuesto, una vez dentro del campo, también a Shark. Más de cuatro seguro. Observad también muchos de los ataques ches, cómo se forma un cráter en zona central formando un ejército de jugadores alrededor del círculo, cómo los centrocampistas-medusas se van a la frontal o escoran su posición a banda, mientras Fuego se queda de lugarteniente defensivo. Observad ese falso movimiento browniano, el comportamiento de los ejecutores, que prescinden voluntariamente de la ocupación del centro con el propósito de dispersar la defensa rival y a su vez renuncian a la creación pausada y lenta, y en caso de pérdida se busca atacar el espacio en velocidad, es decir, anticipar en recepción, y si no es posible, repliegue rápido de un equipo aparentemente partido en dos aunque con nexo de unión a través de los laterales-extremos en banda, por lo tanto, un nexo atípico, excéntrico, distinto a lo que uno podría esperar. Pero el vaciamiento del centro, por lo que conlleva implícitamente, concede espacios en esa zona central que el equipo rival, si no se ha dispersado y si no le ganan en anticipación, puede aprovechar, para a continuación buscar rápidamente las lanzas de ataque a la espalda de la defensa, quizá la mayor debilidad defensiva que ha mostrado el Valencia a lo largo de la temporada. Nuno confía mucho en sus jugadores defensivos, ya sea frenando al rival para permitir la llegada de apoyos, como en las situaciones de defensa individual más cobertura. No me hagáis mucho caso, eh, probablemente esté delirando en mi síndrome de megalómano, lo sé, cuando mi cerebro se pone a elucubrar y asociar e imaginar e inventar es difícil de parar, aunque al final sólo logre transmitir un esbozo de lo que pasa y se pierde en él a la velocidad de la luz. Agradeceros vuestra atención, je, a todos los que habéis aguantado sin abandonar esta escueta introducción, mero apunte. ¿Hay alguien ahí? ¿Hola? Jo, parece que la soledad me persigue. No consigo deshacerme de ella. ¿Seré un petulante?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario